El cordón umbilical es una estructura gelatinosa que une al feto o al bebé con la placenta de su madre, con la que intercambia sustancias nutritivas y sangre. Habitualmente consta de dos arterias y una vena, por las que se asegura la respiración y la alimentación del bebé hasta el momento del nacimiento. En el parto se pinza y se corta esta conexión, quedando un muñón umbilical de unos 2-3 centímetros en el recién nacido, hasta que éste se desprende, dejando una cicatriz que nos acompañará durante toda nuestra vida: nuestro ombligo. ¿Cuáles son sus cuidados? Consultarlo aquí.