La procesionaria del pino es un pequeño insecto peludo que parece inofensivo a simple vista pero que puede convertirse en una amenaza para nuestros niños y niñas (y no tan niños). Pero, ¿Qué es lo que hace la procesionaria? ¿Por qué nos preocupa? ¿Cómo podemos evitarla?
¿Qué es la procesionaria del pino?
La procesionaria del pino es una especie de oruga que se encuentra comúnmente en los bosques de pinos y otras áreas arboladas. Abunda en bosques de pinos de Europa del sur, como los pinares españoles.
Recibe diversos nombres como, cuc de pi en Cataluña y Comunidad Valenciana, cuca de pi en las Islas Baleares, sirganos en Teruel, piñu-mozorro o piñu-beldar en el País Vasco y Navarra, o procesionaria do piñeiro, carroceiro o arrieiro en Galicia.
Estas orugas se ganan su nombre por la forma en que se mueven en fila, como si estuvieran en procesión. Aunque su aspecto peludo pueda parecer inofensivo y den ganas de tocarlas, es precisamente ese pelo el que esconde una amenaza para la salud.
¿Qué peligro tiene la procesionaria?
Las cerdas (pelos) de la procesionaria contienen una toxina llamada thaumetopoeina, que puede ser extremadamente irritante para la piel, los ojos y las vías respiratorias de las personas. El contacto directo con estas orugas o incluso con sus pelos dispersos en el ambiente puede desencadenar reacciones alérgicas graves, desde erupciones cutáneas hasta dificultad para respirar. Aunque lo que vemos con más frecuencia en la consulta es la reacción urticariforme en la piel (urticaria).
¿Cómo proteger a nuestros niños y niñas de la procesionaria?
- Educación y conciencia: enseñarles a reconocer y evitar la procesionaria del pino. Explicarles los riesgos de tocarlas o acercarse demasiado a ellas. Pueden llamar mucho su atención, por lo que este punto es muy importante.
- Ropa protectora: cuando estemos en áreas donde pueda haber procesionaria o en la época en la que es más frecuente, usar ropa que cubra la mayor parte del cuerpo.
- Supervisión constante: como siempre, vigilar de cerca a nuestros pequeños, más aún si están jugando al aire libre y en zonas boscosas, donde la procesionaria es más común.
- Lavado de manos: enseñarle siempre a lavarse las manos después de jugar, antes de comer o tocarse la cara. Ya sabéis que el lavado de manos salva vidas.
¿Qué hacer en caso de contacto?
Ya hemos comentado que, a veces, el contacto no tiene por qué ser directo. Podemos contactar con los pelos que flotan en el ambiente, por mucha precaución que hayamos tenido de que no se acercaran a zonas donde había orugas o a los pinos donde estaban sus niños.
Si sospechas que tu hijo ha estado en contacto con la procesionaria del pino…
- Urticaria o piel irritada: lavar la zona afectada con agua tibia y jabón suave. Si las lesiones son muy pruriginosas (que pican), antihistamínico oral. A veces son necesarios otros tratamientos. Si dudas, consultad con vuestro pediatra.
- Ojos afectados: lavar los ojos con agua fresca en abundancia, suero fisiológico, lágrima artificial. Si no mejora, consultar con vuestro pediatra.
- Dificultad para respirar: ni que decir tiene que habría que consultar urgente.
Conclusión
La procesionaria del pino puede ser una amenaza real para la salud de nuestros niños y la nuestra. Sin embargo, con educación, precaución y supervisión, podemos minimizar los riesgos y garantizar que nuestros seres queridos disfruten de un entorno al aire libre seguro y saludable.
Y ya sabéis, paciencia, besos y muchos mimos siempre.
Pediatribu
Enlaces externos:
- https://www.nationalgeographic.es/medio-ambiente/procesonaria-lo-que-necesitas-saber
- https://www.youtube.com/watch?v=ZvwnhygRqok